Una cocina bien diseñada puede ser la diferencia entre un servicio fluido o un caos diario. Si tu equipo choca entre sí, si los platillos tardan en salir o si hay áreas sucias o mal ventiladas, lo más probable es que el problema no sea solo del personal… sino del diseño de la cocina. No necesitas una cocina enorme para que funcione bien. Lo que realmente importa es cómo organizas el espacio, los equipos y el flujo de trabajo. Aquí te comparto los puntos clave que debes considerar para tener una cocina más eficiente, segura y productiva.

1. Distribuye por zonas de trabajo

Una cocina profesional debe estar dividida en zonas específicas. Cada zona tiene su función y debe tener el equipo necesario cerca:

Zona de almacenamiento: para secos, refrigerados y congelados.

Zona de preparación: donde se hace el mise en place (cortes, mezclas).

Zona de cocción: estufa, horno, freidora, plancha.

Zona de emplatado y pase: para montar y entregar los platillos.

Zona de lavado: para trastes, utensilios y contenedores.

Cuando estas zonas están bien definidas, se evitan recorridos innecesarios y se trabaja más rápido y con menos estrés.

2. Acomoda los equipos de forma lógica

Los equipos deben colocarse siguiendo el flujo natural de trabajo: desde que el insumo llega, hasta que el platillo sale al cliente.

Por ejemplo:

Refrigeradores cerca de la zona de preparación.

Estufa y horno cerca del pase.

Fregadero y lavavajillas en una zona apartada, pero de fácil acceso.

También es importante evitar errores comunes, como poner equipos de calor (freidoras, hornos) junto a refrigeradores. Esto hace que los compresores trabajen de más y consumas más energía.

3. Instala una buena campana de extracción

El sistema de extracción es básico. No solo elimina el humo y la grasa del ambiente, también mantiene la cocina fresca y evita malos olores. Debe colocarse justo sobre las áreas de cocción y contar con filtros que se limpien regularmente. No escatimes aquí: es salud para tu equipo y una obligación legal en muchos casos.

4. No olvides los lavamanos

Parece un detalle menor, pero no lo es. El lavamanos debe estar visible y accesible. Si el personal tiene que caminar mucho para lavarse las manos, lo hará menos. Idealmente, debe haber uno en cada zona de trabajo.

En resumen:

Una cocina eficiente no se trata de lujo ni de tamaño, sino de orden. Si mejoras el acomodo de tus equipos, divides bien las zonas, aseguras la ventilación y colocas los lavamanos donde deben estar, verás un cambio real en la velocidad, limpieza y ánimo de tu equipo.